Piscinas de obra: lo que debes saber antes de comenzar

Piscinas de obra: lo que debes saber antes de comenzar

Construir una piscina implica realizar una de las mejores inversiones de tu vida si la aprovechas a menudo después; Un lugar para ganar tranquilidad, placer y una oportunidad única de diversión para los niños, entre otros beneficios.

Sin embargo, debes saber que construir una piscina no requiere de cuestiones muy complejas, pero sí de un alto nivel de precisión en lo que respecta a orden, materiales y otras condiciones.

Concretamente, hay tres cuestiones que debes tener en cuenta no solo para construir una piscina, sino también para evitar inconvenientes en el futuro.

Determinar su objetivo y uso

El primer paso es planificar y determinar el objetivo real de la construcción de la piscina; no es lo mismo si deseas una pequeña para disfrutar al aire libre o para tus hijos que para personas deportistas.

Se trata de detalles que te permitirán definir el formato, el tamaño y la profundidad de la piscina, además de los accesorios internos y externos.

Accesibilidad y terreno

Antes de comenzar con la construcción de la piscina, debes analizar y estudiar en detalle la composición del terreno con el fin de saber si soportará el pozo con todo el peso del agua y las personas.

De hecho, una piscina tiene que estar siempre asentada en un terreno muy firme y completamente horizontal, además de contar con vías de acceso en las partes menos profundas. Por esta razón, necesitas un terreno amplio y de alta resistencia tanto al agua como a otros factores.

Establecer el tipo de piscina más conveniente

Según diferentes cualidades del terreno donde la construyas, la piscina puede ser elevada, de fibra de vidrio o de gunita.

La primera está construida sobre el terreno y no requiere de ninguna obra compleja, por lo que resulta la más sencilla y económica.

La segunda es muy adecuada para áticos o azoteas ya que pesa muy poco y es muy resistente a los desgarros y a la decoloración, lo que implica una gran ventaja en muchos contextos. A su vez, el liner se ajusta sin inconvenientes al diseño y presenta un mantenimiento muy escaso.

La tercera consta de moldes previamente diseñados y es fácil de instalar, aunque no resulta práctica al largo plazo debido a su complejidad de mantenimiento y a la calidad de algunas partes.

Por último, con la cuarta sucede lo contrario a la de fibra de vidrio; su precio es elevado, pero implica una muy buena inversión a futuro dado su nivel de resistencia y su larga duración.

Cabe destacar que el sitio en el que construirás la piscina es uno de los factores más importantes; no es igual un jardín de 100 metros que una terraza pequeña donde no puedes perforar el suelo.

En este contexto, existen diferentes tipos de piscina y factores que influyen notablemente al momento de construirlas y ponerlas en funcionamiento. Asesórate siempre con un experto y no te apresures al momento de tomar la decisión final.